MIENTRAS ESPERAMOS LAS EXPLICACIONES…

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… del 56% de inquilinos, de tenedores de plazos fijos, de jubilados, de propietarios de PyMes, de trabajadores privados y públicos, de jubilados, de desocupados, de trabajadores en negro, de jóvenes estudiantes, de científicos y profesionales universitarios, lo que nos permitirá saber con certeza las causas por las cuales llegamos a esto, podemos empezar a hurgar, siempre desde nuestras relatividades, algunas de ellas.

LA INSATISFACCION DEMOCRATICA

En los últimos años ha surgido un estado de ánimo en vastos sectores de nuestra sociedad relacionado a la falta de respuestas a las demandas sociales que expresan sus necesidades. Es lo que llaman insatisfacción democrática.

¿Cómo expresar con claridad que es la insatisfacción democrática?

Intentaremos explicarlo tomando algunos indicadores ante los cuales, como sociedad, no podemos comportarnos como perro que volteo la olla.

Y a esos indicadores pongámosles, en números, los seres humanos que representan.

Niñez

Esto va cortito y al pie. ¿Qué vamos a agregar?

Desde 2015 hasta 2023 la pobreza de niños, niñas y adolescentes de hasta 17 años saltó de 4 millones a 7 millones.

Siete millones de niños, niñas y adolescentes pobres.

[Luego de dos mandatos presidenciales de signo ideológico totalmente opuestos. Uno de ellos tiene como mandato doctrinario que los únicos privilegiados serán los niños]

Juventud

En la actualidad la población argentina está compuesta por 10 millones de ciudadanos y ciudadanas en la franja etaria de 18 a 30 años.

De estos 10 millones de jóvenes el 27% estudia.

De los 7,3 millones considerados población económicamente activa, el 77% se encuentra en condición de desocupados, forma parte de la economía informal, realizan actividades de cuentapropismo o se encuentra inactivos sin ingresos.

Este vasto sector juvenil está inmerso en situación de desprotección laboral, es decir “…personas que trabajan, o tienen la voluntad de hacerlo (desocupados/as) y no son alcanzados/as por la protección social, ya sea porque se encuentran por fuera del amparo ofrecido por el empleo registrado, o bien porque su fuente de trabajo, incluso formalizada, no les permite acceder a derechos equivalentes a los de los/as trabajadores/as registrados/as”.

Esa desprotección laboral, que entre 2003/2015 había descendido del 78% al 65%, volvió a ubicarse a finales de 2023 en el 77%.

Cinco millones seiscientos mil jóvenes sin la protección de derechos para ellos cancelados.

[Luego de dos mandatos presidenciales de signo ideológico totalmente opuestos, uno de ellos considera a la juventud como cuarta rama de un movimiento nacional y popular..]

Salarios formales

Con la mediana salarial, que nos expresa el valor del salario donde una mitad de trabajadores lo iguala o supera y la otra mitad lo iguala o queda por debajo, veamos cómo podemos registrar un hecho inédito en nuestra vida socioeconómica: trabajadores formales pobres.

En diciembre de 2015, la mediana salarial ($ 18.434) superaba en un 156% a la línea de pobreza ($ 7.194).

En diciembre de 2019, la mediana salarial ($ 58.700) superaba en un 50,5% a la línea de pobreza ($ 39.000)

En agosto de 2023 la mediana salarial ($ 311.000) superaba en un 9% a la línea de pobreza ($ 285.000)

Otra vez, resumamos: desde la casi inexistencia de trabajadores y trabajadoras formales por debajo de la línea de pobreza, en 8 años encontramos que 6 millones de trabajadores y trabajadoras formalizados apenas llegan o directamente quedan por debajo de la línea de pobreza.

Seis millones de trabajadores y trabajadoras formalizados.

El trabajo dignifica, dijo alguien alguna vez.

[Luego de dos mandatos presidenciales de signo ideológico totalmente opuestos. uno de ellos considerando a los trabajadores como columna vertebral de su movimiento]

Jubilaciones

En otro momento traeré algunos aportes de mi amigo Henry Negroni, (a) El refutador de giladas (como gusta llamarse), sobre el regimen previsional argentino, (la verdadera DEUDA interna del país) pero ahora vayamos a esto.

En el sistema previsional nacional, excluyendo a los provinciales, hay 5,7 millones de beneficios jubilatorios, de los cuales 2,2 millones cobran la mínima de $ 105.712. Además otras 1.3 millones de jubilaciones están sobre la mínima pero no superan los $ 211.000.

En 2015 una jubilación mínima ($ 4.299) cubría el 60% de la canasta básica que marca la línea de la pobreza ($7.194). En diciembre de 2023 solo alcanzará al 23% de esa canasta que superará los $ 450.000.

Con esa línea de pobreza y aun considerando que muchísimos hogares perciben dos haberes previsionales como resultados de las moratorias previsionales, no hace falta mucho cálculo para visualizar a 3,5 millones de ancianos en la pobreza.

[Luego de dos mandatos presidenciales de signo ideológico totalmente opuestos, uno de los cuales dio rango constitucional a los derechos de la ancianidad.]

Y por último, para asegurar el entendimiento.

Pobreza

El estallido de la convertibilidad dejo en el año 2003 a 22 millones de argentinos y argentinas en la pobreza. Eran el 60% de la población de ese entonces (37 millones)

A finales del 2015 quedaban en esa situación 10,5 millones de compatriotas. Representaban el 25% de 42 millones.

Cuando termino un nuevo mandato presidencial en el 2019, los y las pobres pasaron a ser 16.5 millones. Esto era el 35% de 44,5 millones de habitantes.

Al desarrollarse el proceso electoral de 2023 la pobreza abarcaba a 20,5 millones de habitantes. El 44% de 46,5 millones.

Bien resumamos: a los 10,5 millones de argentinos y argentinas, que desde el 2015 esperaban salir de la pobreza y nunca salieron de la pobreza, se le sumaron otros 10 millones de pobres.

[Luego de dos mandatos presidenciales de signo ideológico totalmente opuestos, uno de ellos teniendo como una de tres banderas a la Justicia Social.]

Para que nos quede claro.

Esto lo quiero escribir sin resumir los números: 10.500.000 de habitantes hundidos en la pobreza desde 2001, a los que se suman otros 10.000.000 empobrecidos luego de dos mandatos presidenciales de signo ideológico totalmente opuestos, hacen un total 22.500.000 habitantes pobres.

¿Saben porque repito 22.500.000 habitantes pobres?

Porque 17.000.000 de esos ciudadanos y ciudadanas empobrecidos formaron parte del padrón electoral de las pasadas elecciones.

No crean que esta es la verdad rebelada del comportamiento electoral de las pasadas elecciones, claro que no.

Solo pido que quienes lean esto, si no se sienten o no tienen a nadie cercano incluidos en la realidad descripta, utilicen la imaginación para entender lo que es la insatisfacción democrática..

IMAGINEMOS ENTONCES

Imaginemos el sentir de esos y esas compatriotas, en sus roles laborales y familiares, activos o pasivos en un caso, o abuelos, padres, hijos, hermanos, nietos en el otro, ganados por la desesperanza, el agobio y el descreimiento en un sistema político que ni siquiera mitiga sus carencias y, por el contrario, las profundiza con el paso del tiempo.

Imaginemos cual sería nuestra conducta política si estuviéramos años y años vulnerados en nuestra dignidad por tener cancelados los accesos a un trabajo formal, a un salario justo, a la alimentación para nuestra familia, a la salud, y fundamentalmente a un futuro mejor sin respuestas de ese sistema político.

[Futuro mejor y cercano digo, no a 15, 30 o 45 años como nos anuncian las fuerzas del cielo]

Si esa imaginación nos funciona quizás podamos entender los sentimientos de quienes se sienten insatisfechos con la democracia.

Seguramente lo que acabo de escribir es solamente una aproximación a las múltiples causas que nos explican a lo que hemos llegado.

Esas múltiples causas nos deben ser explicadas por ese colectivo, social y económicamente transversal , del 56% de votantes, para saber con certeza las demandas de inquilinos, de tenedores de plazos fijos, de jubilados, de propietarios de PyMes, de trabajadores privados y públicos, de jubilados, de desocupados, de trabajadores en negro, de jóvenes estudiantes, de científicos y profesionales universitarios.   

Y esto no lo expreso como una chicana o culpabilizando a ese 56%, lo hago para que así podamos entender, como sociedad, lo que no pudimos, no supimos o no quisimos entender. Porque como sociedad también debemos hacernos cargos de la indiferencia conque asumimos las condiciones sociales de aquellos con quienes convivimos.

Con esta opinión intento poder visibilizar las causas de ese estado de conciencia política que, en vastos sectores sociales, se ha llamado insatisfacción democrática y que ha constituido el origen de la llegada a la presidencia de la Nación de este personaje de intelectualidad mediocre, de argumentaciones falaces, de aseveraciones incomprobables, practicante de una mezcla rara de esoterismo y religiosidad.

No tengo dudas que esa insatisfacción democrática, originada en en multicausalidades, ha sido el huevo de la serpiente de este proyecto de disolución nacional y selvatización social que hoy nos interpela.

Y que nos obliga a buscar respuesta a otro interrogante que no se nos puede escapar como conclusión a la cruda realidad de los datos expuestos.

[Luego de dos mandatos presidenciales de signo ideológico totalmente opuestos, uno de ellos nacido del campo nacional y popular] 

¿Quién representa a los intereses nacionales y populares en la Argentina que viene?

Y eso no será para blandos, ni para tibios, ni para los que los corren con una tapa de diario. 

Hasta pronto.


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